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¿IMPOSIBLE? UN BRAZALETE DE FÚTBOL Y JORGE LUIS BORGES



Soy el Capitán del Morón C.F. en esta temporada 2016/2017. Llevó años mereciendo este honor. Como lleva años ese extraño espectador que se encuentra apartado de la gente, en un asiento solitario de la esquina de la grada. Un anciano, serio y solitario que observa cada partido con detenimiento, sin quitarle ojo al terreno de juego, cada jugada, cada pase…, y que se fija en mí claramente. Cada vez que nos cruzamos las miradas, se quedaba inmóvil, con algo entre las manos: una especie de tela no muy larga, de apenas 10 cm que no le importa mostrarme, como una señal.
Ahora ya sé lo que es. En mi taquilla, sin que nadie lo advirtiera, me he encontrado con un brazalete que me resultaba familiar, y juraría haberlo visto antes, lo extraño es que llevaba grabado una frase : “Felices los valientes, los que aceptan con ánimo parejo la derrota o las palmas. (J.L Borges)”. En ese instante me quedé perplejo con aquel mensaje, no entendía nada, hasta que de repente se me vino a la cabeza la imagen de aquel señor y lo que tenía entre sus manos durante todo el partido.
¿Me estaría dando una lección para mejorar como futbolista? Desde luego, ese brazalete es ahora mi seña de identidad y no sé si seré mejor futbolista, pero mi actitud es distinta ahora que comprendo su significado. Sin embargo, desde entonces, ya no lo veo en las gradas. He preguntado a los demás jugadores, al entrenador, a los utilleros, pero solo uno de los empleados me ha dado una mínima información. Se llama, por lo visto, Marcelo Oise Valencia.



Nota del editor: El brazalete lo tenemos en nuestro poder.

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